(Preguntas y comentarios: lic.mariananu@gmail.com ó 312.26.21 // 312.26.20)

martes, 10 de mayo de 2011

“MUJER NATURALEZA MATERNAL, INTUITIVA Y DELICADA… MUJER QUE TAMBIÉN DEBE SER APOYADA"




Hablemos hoy del misticismo y la grandeza de las madres, de todo lo que su belleza engloba, de todo lo que ellas hacen y deshacen por el bien de los demás antes que el propio. De su inexplicable razón de darlo todo, de cederlo todo, de lograrlo todo, de cambiarlo todo y de superarlo todo. De cómo en secreto callan, soportan y “cargan” lo que la vida y los años le otorgan. Mamá hoy hablemos de ti que sacrificas desde siempre tu salud y belleza física por los hijos, por el marido, por la familia. Por ti mamá que a veces el entorno te juzga tanto y con el que tratas de quedar bien y complacer, cuando no deberías congeniar con ellos y sus exigencias, más que por tu bien. Mamá hoy hablemos de lo difícil de ser Tu, de lo difícil que ser mamá es.

¿Por qué la mujer se acaba más rápido que el hombre? ¿Por qué a veces suele haber más cambios de peso y de físico de ellas que en el de ellos? ¿Por qué las madres se descompensan tanto y los papás no tanto? Tengo la hipótesis “semi-probada” (Y digo “semi” porque lo único que me falta para corroborarlo al 100% es “un pequeño gran detalle”… Ser mamá); aunque en mi defensa debo decir que de momento no necesito más, pues los cimientos más fuertes de mi teoría se basan en el trato directo con familiares y pacientes que son mamás y que siguen un patrón recurrente, que luchan o batallan con las mismas cosas y con las que hay que trabajar siempre un poquito mas cuando se trata de adelgazar (Por cierto… Gracias por la lección que me han dado todas mi pacientitas bellas que son mamás). Dicha Teoría trata de lo difícil que les resulta a las mujeres bajar de peso a diferencia de los hombres (Especialmente si estas mujeres ya son mamás) y de la presión que existe sobre ellas para estar “coquetas” para conquistar constantemente al marido (Por que si no…. ¡Aguas que se lo vuelan las jóvenes delgadas y bellas!), aun cuando el objetivo principal de cuidarse físicamente, deba ser primeramente por su salud más que por todo lo demás. Sin querer darles excusa para que se escuden en ello, hay que aceptar que el entorno para las madres de ayer y más aun, para las de hoy en día que además de todo trabajan; siempre tiene un cierto grado de dificultad adicional ¡Ejem! Repasemos las causas… 1. Las mamás normalmente preparan la comida para todos en casa y tienden a “degustar” a cada rato de lo que se prepara para evitar el típico: “está muy caliente”, “esta muy salado y así no lo quiero”, etc. 2. Las mamás siempre o casi siempre se sientan a la mesa hasta el último, no por gusto ¡Sino hasta sentir que han arreglado el mundo! (Poner la mesa, calentar la comida o en su defecto las tortillas, servirles a todos o al menos a la mayoría, ajusticiarse a uno que otro “rebelde” que se niegue a probar bocado, etc.) 3. Las mamás nunca van a permitir que se desperdicien los sagrados alimentos, así que la mayoría de las veces (Y lo digo con todo respeto) se vuelven por practicidad, “máquinas devoradoras de sobras”, como complemento EXTRA de su platillo principal. 4. Las mamás tienen que hacer rendir el gasto y tratan de comprar lo que a todos les gusta en casa para no ver “caras largas”; y si de momento ve que no “alcanza” para comprar sus productos de “dieta” o si cree que su dinero le rinde más comprando 1 litro más de leche entera para toda la familia, en lugar de 1 Litro de Leche Light sólo para ella ¡Tengan por seguro que no dudará en hacer a un lado su dieta y elegir la primera opción!. 5. Las mamás suben y bajan organizando, limpiando y administrando toda la casa, solucionan discusiones familiares cual “Referí” profesional, se dan tiempo para escucharnos en sesiones de más de una hora (Y no cobran lo que una Psicóloga profesional), nos llevan y nos traen a todo lugar y no tienen Conseción Taxi; las mamás dedican la mayoría del día a su familia, su esposo, su trabajo y sus “pendientes” y raras veces les quedan ganas o fuerzas para hacer algo para ellas mismas (Las clases de “Rumbera profesional”, Macramé Nivel Dos y el Tai Chi, serán para después). Amigos lectores, cito todo lo anterior con la finalidad de hacerles ver lo que todos vemos pero ignoramos, para que apoyemos más a nuestras señoras madres, esposas, hermanas y amigas para que quitemos peso de sus hombros sabiendo que, por naturaleza propia, ellas no cederán fácilmente a dejar de ver por los demás y empezar a ver por ellas mismas. Señoras ustedes se preocupan por todos, pero si no se preocupan por ustedes, al rato que surjan las enfermedades, las descompensaciones y demás (¡Toco madera!) No estarán bien para ver por los suyos… ¿Por qué llegar a ese extremo para querer cuidarse?

¡MAMÁ GRACIAS POR TODO LO QUE NOS DAS!

lunes, 4 de abril de 2011



¡UNA EXPLOSION DE COLOR!

¡Ah la primavera! Llega ésta época del año en que todo es luz y color; la flora se reviste con la más amplia gama de colores existentes para deleite de nuestros ojos y para mayor estimulación de nuestros sentidos. Cuando percibimos color en todo nuestro alrededor, se siente esa perfecta sincronía existente entre lo que se ve y lo que se siente (Generalmente el clima coopera para que todo se mantenga verde y fresco) lo que transmite armonía y sensación de equilibrio total. ¡Así es en la naturaleza! Y también ¡Así es en la nutrición! Variedad de color es sinónimo de equilibrio en la alimentación, principio básico para la formulación del ya conocido “Plan De Alimentación Arco iris” y de las campañas de nutrición y salud lanzadas por la OMS y demás instituciones gubernamentales a nivel nacional para la promoción del consumo de frutas y verduras de manera variada pero equilibrada, con la finalidad de obtener un mejor estado de salud y nutrición en la población. Para que se vayan familiarizando más con el tema… ¿Recuerdan la famosísima campaña que, apenas hace algunos años se lanzó aquí en México y en otros países como Chile y Estados Unidos, que consistía, entre otras muchas cosas, en tapizar con carteles con el logo de una mano con dedos pintados de diferentes colores (Manita Colorín) en todas y cada una de las paradas de autobús? ¿Recuerdan que 5 eran las porciones de frutas y verduras que se nos recomendaba consumir al día y que, preferentemente debería ser cada ración de un color diferente? Bueno… ¡Pues ahí lo tienen! Sin duda ya tenían idea de la campaña que ahora les menciono (5 Frutas Y Verduras Al Día Por Tu Salud) y de este ya tan famoso Plan De Alimentación Arcoiris, que a diferencia de muchas “loqueras” que se han intentado promover por ahí, verdaderamente tiene fundamentos y los beneficios coinciden perfectamente con los cuidados que se estiman al momento de llevar acabo este tipo de alimentación. En Estados Unidos y el continente Europeo este Programa De Alimentación ha causado verdadero furor; y es que la Dieta de Colores ó Plan de Alimentación Arcoiris, es un régimen que se basa en consumir frutas y verduras de diferentes colores para mantener una alimentación equilibrada. Además del equilibrio nutricional, este tipo de dieta busca estimular los sentidos a través del aspecto que adquieren los platillos que se consumen al momento de combinar los colores en una sola o varias preparaciones. Dentro de este Plan, cada color es equivalente a un tipo de aporte nutricional, ya que los diferentes nutrientes que contiene cada alimento son los encargados de dar uno u otro color y a su vez, uno u otro tipo de beneficios, pues tras los colores se esconden pigmentos, vitaminas y minerales con beneficios demostrados para la salud. La idea principal de éste programa es: “Que mezclar colores anima a comer y hace que los platos sean más apetecibles para todos”; por lo que lo ideal es convertir la comida en un arcoiris al combinar o simplemente incluir en la dieta diaria dos raciones de verduras y hortalizas, más tres raciones de fruta al día. En la Dieta De Los Colores, los alimentos se agrupan por sus cualidades cromáticas (Es decir, según su color) en 5 diferentes grupos básicos: ROJO – MORADO: estos alimentos se caracterizan por contener altas dosis de antioxidantes, encargados de proteger a las células del organismo y los ataques causados por los radicales libres. Se trata de los alimentos más eficaces para mantener la juventud y el buen funcionamiento del organismo por más tiempo. Ayudan a mantener el sistema circulatorio y el corazón en perfectas condiciones, y además permiten prevenir diferentes tipos de cáncer. Dentro de este grupo se encuentran las berenjenas, moras, uvas moradas, pasas, arándanos, zapote y ciruelas. ROJO: alimentos que contienen altas dosis de betacarotenos necesarios para mantener la salud de la piel, ya que permiten protegerla de los radicales libres que se reciben de agentes externos como el ambiente y el sol. El alto poder depurativo de estos alimentos favorece a la eliminación de toxinas del organismo; mientras su alto contenido en antioxidantes permite proteger las células del cuerpo. Entre estos alimentos se encuentran las moras rojas, fresas, jitomate, manzana roja y sandía. VERDE: ayudan a prevenir el colesterol malo, mejorando así la circulación y evitando enfermedades cardiovasculares. Sus altas dosis de fibra ayudan a mantener un correcto tránsito intestinal. Dentro de este grupo destacan los brócoli, kiwi, manzana verde, nopales, verduras de hoja verde como la lechuga, cilantro, col, quelites, verdolagas, acelgas y espinacas. BLANCO: contienen un alto poder antioxidante, y permiten mantener el organismo protegido frente a ciertos tipos de cáncer. Estos alimentos también ayudan a reducir los niveles de colesterol en sangre, mejorando así la presión arterial. Actúan como refuerzo del sistema inmunológico ya que favorecen la producción de defensas del organismo y mejoran la resistencia frente a los agentes que pueden causar algunos tipos de enfermedades. Entre estos alimentos destacan las cebollas, los ajos y el poro. AMARILLO – NARANJA: ayudan a mantener huesos y dientes fuertes y sanos, además de favorecer una piel saludable y una vista perfecta. En este grupo de alimentos destacan la naranja, mango, durazno, papa, zanahoria, mandarina, la piña, el plátano y la papaya. Así es como cobra verdadera importancia que diariamente incluyamos en nuestra dieta alimentos de todos colores con el fin de mantenernos sanos; de tal suerte que saber combinar los colores no sólo sea útil al momento de vestir o de disfrutar el paisaje, sino también … ¡Al vivir!

jueves, 17 de febrero de 2011

AJUSTES POR AQUÍ Y POR ALLA


Mi querido lector, el último tema que tratamos en esta su columna de educación en nutrición, hablaba de las pequeñas pero significativas modificaciones que podíamos hacer a nuestra dieta y estilo de vida para favorecer al cumplimiento de nuestros propósitos de bajar de peso, estar más sanos y ¿Por qué no? Esculturales cual maniquíes de aparador. Si bien los “Tips” que ya mencioné tendrán grandes beneficios para la vida cotidiana, no contemplan específicamente las situaciones adicionales a la rutina de casa, como lo es: comer fuera de casa porque en el trabajo hay servicio de comedor o porque no hay tiempo suficiente y/o cartera que pueda “surtir” sin repercusión a la economía familiar, el gasto de golosina para ir: “De la casa al trabajo, del trabajo a la casa, de la casa al trabajo y finalmente… Del trabajo a la casa”; o simplemente por que se nos antoja comer fuera de casa un día domingo, pues nos queremos dar el “lujito” (“Por que usted, lo vale”) o porque es el cumpleaños de alguien y la reunión será en un restaurante elegante, etc. Normalmente pensamos que comer fuera de casa es sinónimo de resignación y de subir unos cuantos “gramillos” de peso (Si bien nos va, pues en la mayoría de los casos, un día de tremenda comilona no implica subir sólo “gramillos”, sino hasta “kilillos”) pues será inevitable “la tragazón”, a lo que tengo que decir: ¡No es condena! El servicio de comedor, hablando primeramente la los cuidados que hay que tener en el trabajo, es una excelente prestación, sobre todo si tiene la opción de elegir entre varios platillos y cuenta con barra de ensaladas; lo único que necesita es tener un buen criterio de selección de alimentos y querer, por supuesto, solicitar las opciones más sanas del menú ¡Que siempre las hay! Solo que no siempre las pedimos… ¡Es más! A veces ni las volteamos a ver; pero elegir los guisados menos grasos que se ofrecen en el comedor y moderar las cantidades de sopas de pasta, arroz y/o frijoles, también pueden ser de gran ayuda. Ahora bien, en el caso de que no haya comedor, pero que se cuente con una cocineta ¡Las cosas se ponen más fáciles! Pues puede usted llevar la comida desde su casa y garantizar la calidad (Poca grasa, elegir cortes más magros como pollo, res sin grasa, pescado o atún, embutidos de pavo, etc.) y la cantidad; si usted lleva sus raciones ya fijas, es decir, modera sus cantidades desde casa (P. Ej. ½ Tza. De arroz o pasta, 2 tortillas, ½ Tza. De frijoles, etc.) Ya estando en el trabajo es imposible que pida más; pero si por el contrario se sirve lo que le toca más el “pilón”, desde casa, el exceso de comida será inminente. Normalmente yo siempre recomiendo las sopas de verdura como una excelente “placebo quita hambre”, pues entre el caldo y la verdura, es fácil quedar satisfecho, pero a veces es difícil llevarlas al trabajo, así que puede sustituir las sopas por ensaladas de verdura que tendrán el mismo efecto de saciedad. Si en el trabajo descubre que más de sus compañer@s se encuentran en la misma situación de querer comer sano pero no tienen tiempo de cocinar en casa, etc. Puede coordinarse con sus compañer@s para acordar que 1 semana o 1 día a la semana, cada uno lleve comida saludable para tod@s; si usted logra coordinar a 5 compañeros, podrás comer sanamente toda la semana, esforzándote por llevar comida sana sólo 1 día a la semana. ¡Ah! Pero eso sí, es importante que acuerden las cláusulas de lo que es sano y lo que no desde un principio, qué ingredientes está permitido usar y cuáles no. (Si les cuesta trabajo, busquen ayuda nutricional profesional para aprender a comer sanamente). Y ya por último, eviten las rondas a la cafetería o las máquinas despachadoras que suele haber en los trabajos, pues es más fácil caer en la tentación de comprar “chatarrita” si la tenemos al alcance. Mejor lleve desde casa sus propios refrigerios hechos a base de verduras, frutas o lácteos como el Yogurt Light o una que otra barra de cereal baja en calorías (Como la Special K, Bran Frut Sin Azúcar, Stila o Gran Vita) para combatir esos antojos. Ahora que, cuando de comer fuera de casa se trata, debemos estar más alerta, pues las preparaciones que se nos ofrecen son mas “para consentir el paladar” y agradar al comensal, de modo que puede estar seguro mi querido lector que lo que buscan los restaurantes, es ofrecernos platillos agradables a costa de lo que sea (Adicionar cantidades industriales de grasa o azúcar, etc.). De modo que, le adelanto que si pretende guardar la línea cuando coma fuera de casa, inicialmente debe de evitar los patillos que en su descripción se usen las palabras: gratinado, empanizado, frito, capeado, a la crema, etc. Pero, para poder tocar más afondo los ajustes que debemos hacer por aquí y por allá, cuando vayamos a un restaurante, un bar o una cafetería; la próxima semana dedicaré este espacio para hablar más ampliamente de las entradas, las bebidas, las guarniciones, los postres, etc. Que son una mejor opción a elegir y que en conjunto con todo lo demás que podamos pedir en una sola sentada, no significarán al final de la tarde “un rollito” de grasa más para la colección.

miércoles, 19 de enero de 2011

LA CUESTA… ¡YA NO CUESTA!


Termina el año y sus festejos y comienza el año con el fin de las comilonas monumentales y las “pachangas” interminables e inicia la “resaca” producto de tanta fiesta consecutiva; situación que no sólo afecta al bolsillo y la economía por supuesto, sino que también deja secuelas en el individuo y su anatomía. Empezamos a resentir los efectos de todo lo que gastamos de último momento y por supuesto, todo lo que devoramos sin el más mínimo tiento ¡Ah! Como dicen por ahí… ¡Ya viene la cuesta de enero y febrero! En cuestiones financieras mi querido lector, aunque moriría de ganas de poder ayudarle de cualquier manera, la verdad es que no tengo más que nociones básicas del tema, así que mejor no conviene arriesgarnos; pero en cuanto a lo que es la nutrición, la alimentación y la solución a todos los estragos Post-temporada (Créanme es mi especialidad pues “El Regreso De Los Arrepentidos De Diciembre” es mi temporada más alta, laboralmente hablando) yo tengo mucho que decir y compartir, así que siga leyendo mi querido lector que voy a darle una lista de tips que le harán darse cuenta de que “la cuesta de enero y febrero… ¡Ya no cuesta!” Bien, si su lista de propósitos de Año Nuevo se vio encabezada por los temas de cuidado corporal y de fomentar un estilo de vida más sano, definitivamente debe empezar a agregar nuevos hábitos de alimentación y rutinas de preparación de alimentos que sean lo más sanos posibles. Para cocinar debe elegir técnicas donde se utilice poca grasa como: horneado, a la plancha, empapelado, a las brazas o al vapor y trate de utilizar la más mínima cantidad de grasa posible; prefiriendo siempre aceites como los de oliva extra virgen, girasol, canola o soya, que en su versiones en aerosol (Como el PAM) son aun mejor, pues nos ayudan a controlar más la cantidad de aceite que se ocupa, aunque su único inconveniente es que son caros; así que para suplirlos puede vaciar un poco de su aceite embotellado en un difusor para dosificarlo de la misma manera y utilizar no más de 2 a 3 disparos en su preparaciones. Para dar sabor a sus alimentos sin agregar calorías a base de grasa como la crema, los aderezos, el queso crema, etc. Utilice las hierbas de olor como: tomillo, mejorana, clavo, especias italianas, laurel, pimienta, albahaca, condimentos de limón con pimienta o ajo, etc. Procure que sus guisos sean a base mayormente de pollo sin piel (Unas 3 veces por semana), de pescado (1 a 2 veces por semana) y de carnes rojas como res (Cortes sin grasa como: filete, molida especial, cuete, etc.) o el puerco (Sólo lomo, pierna o filete) de 2 a 3 veces por semana únicamente; acompáñelos siempre de verduras ya sea dentro del mismo guisado o como guarnición en forma de ensalada o de guisados (Esto ayudará a moderar la cantidad de carne que consume, pues al comer más verduras le queda menos espacio para la carne). Si se ha propuesto no comer entre comidas, el proceso de adaptación puede ser duro, así que facilítese las cosas teniendo a la mano un recipiente lleno de verduras picadas como: jícama, pepino, zanahorias, betabel rayado, etc. Para que pueda “picar” fácilmente cuando tenga ansiedad o antojo; o en caso de que su “antojo” tenga predilección por lo dulce, tenga a la mano porciones individuales de Yogurt para beber Light (1 Pza. De Svelty o Yoplait Light, o Vitalinea o Activia 0%, etc.) O helado Light (1/2 Tza. De helado Svelty) que son muy buenos “placebos” para matar el antojo; al igual que 1 Tza. De gelatina Light, ya sea de leche o de agua (La marca D´Gari Light maneja una variedad y una sabor excelente) y el jugo de verduras (Tipo V8) pueden ser también excelentes colaciones bajas en calorías. El consumo suficiente de agua también es básico para un estilo de vida saludable, un promedio de 1.5 a 2 Lts. De agua es un excelente aporte para el organismo, si bien en épocas de frío no se antoja mucho el agua, puede consumirla en versiones de Té sin azúcar (Por lo que el Nestea o el Lipton definitivamente quedan fuera de lo permitido) O bien, si el clima no es el inconveniente, sino más bien que se le olvida tomarla, entonces llene siempre una botella de 1 Lt. De agua y colóquela en su auto para llevarla a donde sea; o bien, sirva una jarra de agua pura y déjela al alcance en su refri, para que cada que abra la puerta se proponga beber un vaso de agua. Y ya por último, trate de planear con anticipación los menús que va a preparar durante la semana eligiendo comidas saludables para que, ya con una idea general de lo que va a utilizarse en la semana pueda ir con tiempo al súper y tener todo lo que se necesita a la mano, para improvisar lo menos posible (Pues improvisando es como normalmente caemos en preparaciones no tan sanas o incluso ordenando comida rápida, mejor conocida como chatarra, para salir del apuro). En fin, estos serían los primeros pasos básicos a seguir dentro de la rutina de alimentación diaria, la próxima semana hablaré de los cambios o modificaciones que se pueden hacer para cuidar nuestro peso aún en circunstancias especiales (Como el café con las amigas, las visitas a los restaurantes o cuando se tiene que comer fuera de casa porque no queda de otra). ¡Esté atento mi querido lector!

EL QUE SUFRE… ¡ES PORQUE QUIERE!



El ser humano es un ser bastante complejo; lo suficiente como para hacerse la vida de cuadritos cuando en realidad es cíclica, lo suficiente complejo como para oír las cosas tan ofensivas o agradables como sus ciclos hormonales o los días laborales se lo permitan y lo suficientemente complicado como para querer sufrir demás cuando las cosas pueden ser “relativamente” simples, ¿A qué voy con todo esto? Bien, hace algunos días que hicimos nuestra lista de propósitos de año nuevo y seguro en más de un punto contemplamos el delicadísimo tema de: “la pérdida de peso”; con base a eso, juntamos todo lo que nos queda de resignación y dignidad y emprendemos nuestro viaje por incontables tiendas naturistas, centros de productos “nutricionales” (¿GNC les suena familiar?), farmacias de todo tipo, tiendas de almacén, cajones de archivos viejos (donde coleccionamos la dieta del sol, la luna y las estrellas, la de la famosísima “sopa de col”, la dieta de “los 3 días”, la del “chicharrón”, la “Mediterránea”, etc. Todas comprobadísimas porque todas las mujeres de la familia, léase tías, hermanas y primas; la han hecho cuando menos 5 veces en su vida y les fueron increíblemente funcionales hace quince años ¿Por qué no lo serían ahora?), centros de acupuntura, mesoterapia, hieloterapia, tratamientos de reducción láser, módulos de TV marketing donde conseguirá “la pastilla 100% natural que le permitirá perder esos molestos rollos de grasa que lo tienen tan incomodo e inseguro”, o la crema “fría y caliente” que permite eliminar toda la grasa corporal a través de la orina (No existe explicación fisiológica para ello… Por eso debe ser toda una maravilla ¿No? ¡Por favor, no haga a un lado mi sarcasmo!); en fin, exploramos toda propuesta comercial que creemos pueda facilitarnos el duro proceso que decidimos comenzar este año nuevo, ya que estamos lo suficientemente “traumados” como para castigarnos rigurosamente y saldar los errores cometidos (o más bien, “comidos”) aunque sea viviendo a base de lechuga y agua de clorofila, aunque cueste vivir con la comezón horrenda que causa esa crema que ha decidido untarse para “moldear su figura”, aunque la pastilla “100% natural” que se compró le genere dolor de cabeza todo el día o peor aun, lo tenga sentado todo el día en el baño con fuertes cólicos o que , incluso muera de asfixia y calor por la faja remodeladota con aloe y algas marinas que promete desaparecer su “abultadito” vientre, etc. En fin, queriendo simplificarlo todo, lo complicamos más; creyendo que la vida se va a solucionar con destapar un bote de pastillas, con lograrnos meter en una faja, con soportar el dolor físico que generan las inyecciones de la mesoterapia, etc. Nos ponemos en grave peligro de atentar contra nuestra vida, nuestra salud y ¿Por qué no decirlo? De nuestra Billetera. Créanme queridos lectores, no hay nada mejor que un camino bien andado, que un hábito bien aprendido y que una pacífica adaptación al entorno; en breve, no hay nada mejor que: aprender a comer. ¿Cree que si fuera cierto todo lo que anuncian en TV para bajar de peso segaríamos siendo de los primeros lugares a nivel mundial en obesidad y sobrepeso infantil y de población adulta? ¿Cree que seguirían sacando cada vez más productos nuevos, si uno sólo es la total panacea? ¿Cree que si de verdad fueran seguros esos productos, las etiquetas tendrían esa famosa frase de: “Este producto no es un medicamento, es responsabilidad de quien lo recomienda y quien lo consume”? ¡Por supuesto que no! Este es un mundo regido por la mercadotecnia más que por la conciencia, por la ignorancia más que por la cultura de la salud y regido por la ley del mínimo esfuerzo y/o de la comodidad; por eso somos presa fácil de todas esas campañas comerciales que hay hoy en día. Sabemos que no hay nada mejor que invertir en la educación, ¿Por qué sólo aplicar esta frase a las escuelas primarias o secundarias? ¿Por qué no canalizar todos nuestros esfuerzos y ganas de ser físicamente mejores a un tratamiento nutricional que no sólo nos saque del apuro de entrar en el vestido de la boda que tenemos a medio año, sino que nos ayude a formar hábitos buenos de por vida? ¿Por qué no acercarnos a profesionales de la salud que han estudiado años el tema de la alimentación, de su relación con la salud, con la parte emocional, etc.? ¿Por qué no incluir a los nutriólogos en los primeros lugares de nuestra lista de sitios a visitar para conseguir los medios que nos hagan bajar de peso? Puedo asegurarles queridos lectores, que los beneficios y resultados que obtendrán de un tratamiento nutricional, que normalmente no es ni “turbo” ni “mágico, serán mucho más duraderos, muchos más notorios y mucho más saludables, que cualquier resultado que consiga usted por su cuenta y/o con apoyo de “muletas” falsas como las que ya se mencioné anteriormente No tenga miedo de experimentar, de conocer, de informarse y de reeducarse con respecto al tema de la comida; en verdad le digo: “El que sufre… Es por que quiere”; cuando de una buena nutrición se trata, morir de hambre o comer mínima cantidad de calorías, hacer malabares o el papel de “fakir” ¡Nunca será el principio básico! Lo mejor es aprender a comer de todo en cantidades moderadas. ¡No tenga miedo de hacer las cosas bien! Seguramente los resultados le sorprenderán.

¡NO SE HAGA ROSCA CON LA ROSCA!


Desde el siglo XIV existía la costumbre de compartir durante las fiestas de fin de año una tarta o pastel, que más tarde, en Francia, durante el siglo XVI, se transformó en la rosca que conocemos hoy en día. Originalmente era un pan octagonal y en su interior guardaba una semilla de haba; aquel que al partirlo encontrara la leguminosa, era nombrado el rey de las fiestas y recibía homenajes y regalos todo el año. Esta celebración pagana era en honor a un dios llamado Jano y con el tiempo se convirtió en una celebración religiosa, efectuándose ahora en honor de los Reyes Magos; conmemorando que, como dice otra de las historias de los orígenes de la Rosca de Reyes, tras su visita al niño Jesús para entregarle sus ofrendas de oro, incienso y mirra; el niño tomó las tres ofrendas y les dio a cambio, un cofre herméticamente cerrado. Dentro del cofre los Reyes encontraron una piedra, con la cual el Niño les quiso significar que debían ser firmes y constantes en su fé, pero como desconocían el significado la arrojaron a un pozo y vieron que de las nubes descendió una llamarada que se hundió hasta la piedra. Comprendieron que se trataba de un talismán, tomaron parte del fuego y lo llevaron a sus respectivos países para mantenerlo ardiendo y utilizarlo en todos los holocaustos”; por lo que también la Rosca conmemora la cercanía de Dios con nosotros.
Los países que más se arraigaron a esta tradición fueron: Alemania, Francia, Italia, Yugoslavia y Polonia (Cada uno con su variante de rosca pero con el mismo significado). La costumbre fue llevada a España en la invasión Árabe, llegando a México durante el virreinato.
El significado de la Rosca de Reyes es, por un lado, que el “mono” simboliza al niño Dios, que se encuentra escondido dentro del pan, y representa el pasaje Bíblico en el que José y María huyen a Egipto tras la amenaza del Rey Herodes de asesinar al niño Jesús. El cuchillo con el que se parte la rosca hace alusión al peligro que representaba Herodes; pero además de este significado, la magia y los regalos, el día de Reyes encierra un significado mucho más importante: la unión familiar y la fraternidad… De tal suerte mi querido lector, que sería un gran error de mi parte oponerme a esta profunda e importante tradición sólo por atentar contra los “kilitos” de mis pacientes. Si, como toda receta que se da por estas fechas, son alimentos que sólo se consumen una vez al año y nos encantaría poder comernos: 10 pavos de navidad, 40 tacos de romeritos, 1 refractario entero de lomo enchilado, que 1 olla de pozole fuera una ración personal y tener 1 Rosca de Reyes entera para nosotros, etc. Pero el hecho de que las celebraciones y su comida se de tan sólo una vez al año no nos justifica a comer lo de todo un año por adelantado, pues estaríamos dándole más significado a la comida del que realmente tiene. Como ya lo mencioné anteriormente, la intención de la Rosca, así como lo fue la cena de Navidad y de Año Nuevo (Además del enfoque religioso que tienen) es fomentar la convivencia familiar y no “La glotonería pura”. De hecho, no es novedad que cada fiesta o vento que hagamos involucre comida, la comida es uno de los vínculos sociales más fuertes que existen, sin embargo no debe ser un pretexto; reuniones tenemos varias a lo largo del año y no en cada fiesta queremos devorar o arrasar con todo lo que en la mesa de la reunión. Como todo, con moderación es mejor, mi consejo para este año mi querido lector, por supuesto que no será el que se abstenga de consumir tan delicioso manjar, pero si que modere la cantidad de rosca que se sirve. P.Ej: una rebanada de aproximadamente unos tres dedos de ancho, es una ración perfectamente aceptable y moderada en calorías (Entre 280 y 320 Kcal.), además así reduce las posibilidades de que le salga el monito y que al rato tengamos que negociar el consumo de los tamales. (Broma). Lo que he sugerido a mis pacientes, tanto para el día de la Rosca de Reyes, como para el día de La candelaria, es que consuman su rebanada de rosca sólo el día 5 o 6 de enero (O en el caso de la candelaria el 2 De febrero), para evitar caer en rachas de consumo de rosca o tamales hasta que se nos acaben. Además, busque tratar de controlar su consumo de carbohidratos (Principalmente de azúcares y cereales) el día en que tengan programada la rosca o la tamaliza; es decir, trate de no consumir nada de tortilla o pan o arroz o bolillo o galletas, etc. En todo el día en el que vaya a festejar, con el fin de compensar el consumo de carbohidratos (Venidos principalmente de la harina del pan o de los tamales y del azúcar) que consumirá más tarde en forma de rosca o de tamal. ¡Ahora sí! A portarse bien que ahí vienen los Reyes Magos. Disfrute el cierre del maratón Guadalupe-Reyes, pero inicie a la par del Año con nueva actitud de vida, aun cuando quedan unos cuantos días más para festejar. ¡Feliz Año Nuevo y ojala que el mundo gire a su favor para que todas Sus Nuevas Metas Se Hagan Realidad! (Preguntas y comentarios: lic.mariananu@gmail.com ó 312.26.20 – 312.26.21).

martes, 11 de enero de 2011

PARA BAJAR DE PESO NO HAY QUE DEJAR DE COMER


¡Así es! Si usted pensaba que la clave para bajar de peso rápida, eficiente y constantemente se basaba en brincarse una comida (por ejemplo, dejar de cenar) o en que es necesario comer mucho menos cantidad de alimento al día o en que es básico eliminar de por vida todo tipo de cereales en su dieta, como: tortilla, pan, arroz, pasta etc. ¡SÉ EQUIVOCA, COMER ADELGAZA!.

¡Sólo necesita buscar la asesoría profesional y nutricional adecuada para descubrir cuál es la cantidad, calidad y distribución de los alimentos que usted necesita para llegar a su Peso Ideal SIN sufrir de más y SIN comer de menos, pero sobre todo SIN rebote!